Todos hemos oido hablar de las propinas. Aunque sabemos que existen, no muchos las dan, y menos aun son los que conocen su importancia en el mundo.
La palabra proviene del latin "propinare" (dar de beber), y consiste en dar una muestra de agradecimiento por el trabajo bien hecho (al camarero del restaurante, al chico del supermercado, etc). Aunque legalmente nadie está obligado a darla es de buena educación hacerlo. Pero la cosa no queda solo en educación ya que en algunos paises, como por ejemplo EEUU, es obligatorio darlas y se podría considerar una ofensa el negarse a ello. Es más, existen unas proporciones preestablecidas para estos casos aunque varían segun el pais:
Dejaremos el 10% del total de la factura (excluidos impuestos) si el servicio y la comida han sido buenos.
Dejaremos un 15% del total de la factura (excluidos impuestos) si el servicio y la comida han sido excelentes.
Nunca se dejará una proporción más alta del 40% pues se considerará un vacilamiento económico.
Las monedas sueltas o calderilla no suelen ser muy bien recibidas, por lo cual, si el trato recibido no fue bueno del todo no estaría mal dejarles una buena proporción de monedillas sueltas.
Asi es que si se va de viaje a algun país extranjero, por si acaso, no se vaya del restaurante sin dejar la propina, pueden salir en su busca ofendidos para preguntarle si le ha parecido mal el trato recibido.